Probablemente has escuchado un sinfín de veces la frase “la boca de los perros es más limpia que la boca de los humanos” y, probablemente, ya lo consideras un hecho incuestionable ... pero ¿alguna vez te has preguntado si es realmente cierto?
Spoiler: la respuesta es no.
Comparar la boca de un perro con la boca de un humano es como comparar manzanas y naranjas. Tanto la boca de los perros como la de los humanos están llenas de microbios, y, si bien existe cierta superposición en los tipos de bacterias entre las especies, también hay una gran cantidad de bacterias dentales diferentes en la boca de tu perro que no encontrarás en la tuya.
Por ejemplo, nosotros tenemos una bacteria llamada Gingivalis y nuestros peluditos tienen a uno de sus parientes, la Gulae. Ambas con de la familia de las Porphyromonas, pero ninguna puede existir en la boca del otro.
Estas bacterias pueden causar problemas en los dientes de perros y humanos, pues están directamente relacionadas con la higiene - y la falta de ella - dentro de nuestras bocas.
¿Sabías que los perros tienen más de 600 tipos diferentes de bacterias en la boca? Nosotros tenemos alrededor de 615 según investigadores de Harvard (así que les vamos a creer).
El número de bacterias puede variar porque a las ya existentes también se les pueden unir otras bacterias que tanto humanos como perrhijos recogemos de nuestro entorno.
Ahora, una pregunta importante: ¿pueden los humanos contraer gérmenes de perros y viceversa?
Respuesta rápida: depende.
Quizás parte de la razón por la que la idea de que “la boca de un perro es más limpia que la boca de un humano” llegó a ser tan aceptada es que normalmente no intercambiamos enfermedades con nuestros perros cuando intercambiamos saliva.
No te vas a resfriar por darle un beso a tu peludito porque la mayoría de las bacterias en su boca no son zoonóticas (es decir que no pueden pasarse de animales a humanos), pero lo que sí puede pasar es que los perros alimentados con una dieta cruda contraigan, por ejemplo, salmonella.
Para hacer las cosas más simples el punto importante aquí es que besar a tu perro es menos riesgoso que besar a otro humano, pero eso no significa que la boca del peludito esté necesariamente más limpia que la tuya, solo tiene un conjunto de gérmenes en su mayoría incompatibles con los nuestros.
